Se acerca la primera estación del año y con ella, uno de los fenómenos más poderosos y el más cargado de energía: el equinoccio de primavera.

En México, existen lugares para presenciar este fenómeno en ambientes naturales, regularmente se programan para los días 20 y 21 de marzo. Y para ser parte de él, apostamos por cinco lugares para vivir esta mágica experiencia.

Para continuar con las aventuras, a continuación te recomendamos cuatro opciones que sin duda, harán de tu viaje algo inolvidable.

• Teotihuacán: donde los hombres se convierten en Dioses

Esta tradición cósmica sigue vigente a pesar de los siglos. De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se estima que más de un millón de personas visitan el lugar en cada equinoccio.

La Pirámide del Sol, es el punto clave para recibir pura buena vibra con los brazos extendidos y mirando hacia el sol.

Turibus te conecta a una experiencia mágica cerca de la ciudad a través del Tour Pirámides de Teotihuacán. Los servicios son de lunes a domingo con salidas desde diferentes puntos como el Auditorio Nacional, el Ángel de la Independencia y el Zócalo Capitalino. Además, el tour incluye alimentos, entradas y guía certificado.

• Tulum: ruinas mayas cargadas de buena energía

Presenciar este fenómeno cerca del mar es algo inolvidable. Este pueblo mágico, tiene una energía y una vibra tan fuerte que hay que experimentar.

En Tulum, la puesta del sol acontece en el edificio denominado “El Castillo”, ubicado en el poniente de la zona arqueológica de la cultura maya.

• Palenque, raíces en la selva de Chiapas

Según el INAH, Palenque es el cuarto lugar con más afluencia en el país durante este periodo. Sin duda, caminar por cualquier sendero de la selva es un espectáculo de la naturaleza te dejará encantado. Además, podrás observar edificios sostenidos por las raíces de las ceibas que crecieron en las entrañas de estos árboles centenarios.

• Chichén Itzá, luces y sombras del pasado

Justo cuando comienza a caer la tarde y el sol se acerca al horizonte, aparecen imágenes que se proyectan en una de las caras de la pirámide principal de Chichén Itzá. La pirámide de Kukulcán es un prodigio de la arquitectura prehispánica, en ella se dibujan luces y sombras que asemejan al cuerpo de una serpiente y que simboliza el descenso de Kukulcán.

El equinoccio de primavera cautiva con su magia revive la tradición prehispánica a través de bailes, cantos y limpias con hierbas e incienso. Obtén tus boletos de autobús en ADO y sorpréndete con espectáculos naturales que suceden solo en México.

¡Llego el momento de viajar más, mucho más!